Esta semana en EdTech Thursday tuvimos el gustazo de entrevistar a Glòria Santaulària, responsable de comunicación de Tiching. ¿Aún no conoces Tiching? ¡Imposible, es la red educativa de habla hispana con más profesores en todo el mundo!
SOBRE TICHING
Describe Tiching en menos de 50 palabras
Tiching es una red educativa escolar presente en diecinueve países pensada para ser el espacio donde la comunidad educativa pueda encontrarse. En ella, docentes, estudiantes, familiares y publicadores pueden compartir y gestionar los recursos educativos necesarios para aprender y enseñar mejor.
¿Qué puede esperar un profesor o un centro escolar cuando entra en Tiching?
¡Tiching está pensada para simplificar la tarea de los docentes! El profesor o profesora encontrará un espacio en el que crear un perfil educativo para reflejar y dar a conocer su identidad educativa, para ponerse en contacto con otros docentes del mundo y compartir sus experiencias educativas, para seguir aprendiendo y enseñando entre iguales.
Además, cuenta con una biblioteca personal, donde podrá organizar los recursos educativos que utilice y generar secuencias didácticas y libros de texto para sus estudiantes, y las clases, que facilitan la comunicación con sus alumnos y alumnas y la adjudicación y evaluación de tareas.
¿Qué beneficios tiene la red para alumnos y familias?
«Las ventajas que Tiching ofrece a los estudiantes son 3 principalmente: permite acceder a recursos educativos y divertidos, con los que ampliar el contenido y aprender de la manera que más les guste; facilita la organización de los mismos en la biblioteca; y proporciona un espacio en el que compartir los recursos y las ideas con el resto de compañeros, docentes y familiares.»
Gracias a Tiching, los estudiantes pueden preparar sus clases y tareas de forma sencilla, organizando sus recursos educativos en un único espacio.
Por otro lado, a los padres y madres les permite acompañar el aprendizaje de sus hijos, ya que cuentan con la opción de seguir su evolución y el desarrollo de sus tareas en un entorno educativo y seguro, además de poder encontrar el apoyo necesario en otros familiares y docentes mediante los Grupos de Interés temáticos.
¿Cuál es el mayor obstáculo al que os habéis enfrentado hasta el momento?
Sin duda, adaptar el buscador y la plataforma a los sistemas educativos de los 19 países que ahora mismo forman parte de Tiching. En un principio únicamente nos encontrábamos en 6 países, y en menos de 3 años pasamos a estar en casi 20 y a multiplicar por seis los contenidos que están al alcance de la comunidad educativa.
Añadir un nuevo país a Tiching es un proceso complicado, ya que requiere, además de introducir todos los centros educativos del estado, establecer una equivalencia entre los contenidos y las asignaturas, para que los recursos que otra persona de otro país ha compartido puedan también aparecer en el buscador siguiendo los criterios del sistema educativo del nuevo país. Todo un reto, ¿verdad? El trabajo de nuestro departamento pedagógico fue clave en este proyecto, además del trabajo de un pequeño equipo de investigación para lograr encontrar toda la información necesaria.
Tiching se ha convertido en la mayor red educativa de habla hispana y está presente en 19 países, ¿cuáles son vuestros próximos pasos?
El objetivo principal ahora es seguir creciendo, y aumentar la interacción entre los diferentes usuarios.
«Queremos fomentar la actividad dentro de los Grupos de Interés, unos entornos temáticos comunitarios para compartir, preguntar, conversar, debatir, descubrir y crear con otras personas que tienen el mismo interés educativo.»
Consideramos que la idea es muy potente, ya que puede servir para que docentes de diferentes partes del mundo puedan apoyarse y trabajar juntos, compartiendo recursos e ideas, algo que consideramos imprescindible para seguir mejorando la educación.
¿Tienes alguna anécdota? Alguna curiosidad de emails enviados por lectores, profesores, padres…
¡Muchísimas! Es habitual recibir mensajes de familiares que nos escriben a nosotros pensando que hablan directamente con el profesor de su hijo o hija, o con el centro educativo, y nos llegan dudas sobre las inscripciones al nuevo curso o sobre qué libro de refuerzo han mandado en clase para el verano. ¡Incluso algún estudiante nos ha escrito pidiéndonos ayuda con los deberes!
SOBRE EDUCACIÓN Y TECNOLOGÍA
¿Cuáles son sus pensamientos sobre el futuro de la tecnología de la educación
«El papel de la tecnología en los procesos de enseñanza y aprendizaje debe ofrecer mejoras, ayudar a optimizar procesos y aportar soluciones. Para nosotros, uno de los potenciales de las TIC es que facilitan el aprendizaje personalizado y la atención a la diversidad.»
Sabemos que cada uno aprende mediante estímulos y estrategias diferentes, por lo que como docentes tenemos que ser capaces de ofrecer a cada uno de nuestros alumnos aquellas herramientas, contenidos y recursos que le permitan aprender. Esto es muy fácil de decir pero requiere un tiempo y dedicación del que no siempre disponemos. Pero, con la ayuda de las TIC, podemos crear diferentes maneras de presentar el contenido: presentaciones, relatos interactivos, vídeos, etc. O crear una gran variedad de actividades distintas: autocorrectivas, juegos, etc. También nos ofrecen más opciones para evaluar y hacer un seguimiento personalizado del alumnado, etc.
¿Cómo crees que impacta la inclusión de las nuevas tecnologías en la escuela?
En un principio hubo cierta tendencia en pensar que las TIC mejorarían los procesos de aprendizaje por el simple hecho de ponerlas dentro del aula. Pero pronto nos dimos cuenta que sin un cambio consciente de la manera en la que enseñamos, las TIC servían de muy poco.
Como hemos comentado, las TIC pueden facilitar y ayudar a aplicar los cambios necesarios en las metodologías de enseñanza y aprendizaje, pueden optimizar procesos y facilitar la tarea docente como guía y facilitador del aprendizaje de los alumnos.
¿Cómo imaginas el aula en los próximos cinco años tras los avances tecnológicos que se pueden producir?
«Imaginamos un aula donde todos los niños y niñas puedan aprender a su propio ritmo, donde cada uno reciba las atenciones que necesita y se les ofrezcan los recursos, contenidos y ayudas según su estilo y ritmo de aprendizaje.»
Imaginamos un aula con más profesores y menos alumnos, donde cada uno de los implicados pueda amar lo que hace, donde los profesores reciban la formación que necesitan, los recursos adecuados y el apoyo del equipo docente y las familias.
Imaginamos, por supuesto, a docentes que compartan los contenidos que crean o utilizan en sus aulas, porque creemos que compartir es la mejor manera de aprender 🙂