Seguramente ya conoces el término de “aprendizaje cooperativo”, que está tomando más fuerza que nunca hoy en día en el mundo educativo. El aprendizaje cooperativo es una metodología educativa que pone el foco en el trabajo conjunto de los estudiantes para aprender algo, realizar un proyecto, conseguir un objetivo…

En el post de esta semana, te explicaremos qué es exactamente esto del aprendizaje cooperativo, qué beneficios tiene su aplicación en el aula, y te daremos ideas para aplicarlo en clase.

Y si te interesa el tema de las metodologías educativas, después de leer este post no te puedes perder estos otros posts sobre aprendizaje por descubrimiento, flipped classroom o visual thinking.

¿Qué es el aprendizaje cooperativo?

Como comentábamos arriba, el aprendizaje cooperativo es una metodología educativa que pone el foco en el trabajo conjunto del alumnado para aprender algo, realizar un trabajo en clase, conseguir un objetivo…

En lugar de realizar tareas de forma individual, se crean grupos para enriquecerse mutuamente y ayudarse mutuamente en la realización de las tareas y proyectos. Se discuten ideas, se comparten conocimientos, se fomenta el debate y el pensamiento crítico, etc.

En el aprendizaje cooperativo, el éxito del grupo depende del trabajo de cada uno de los estudiantes, por lo que se establece una relación de interdependencia, en la cual hay que apoyarse mutuamente y colaborar para conseguir buenos resultados a nivel grupal.

Beneficios de introducir el aprendizaje cooperativo en el aula

Algunos beneficios de aplicar el aprendizaje cooperativo son las siguientes:

• Desarrollo de habilidades de comunicación y sociales: al trabajar en grupo, se desarrollan habilidades de comunicación, ya que deben comunicarse ideas, debatirlas, hacerlas entender, contraponer opiniones… También se desarrollan habilidades sociales, de empatía, de resolución de posibles conflictos…
• Aprendizaje más profundo: al discutir ideas y poner en común diferentes opiniones, se profundiza más en los conceptos tratados, ganando un aprendizaje más significativo de ellos. Esto ayuda a que los conocimientos perduren más tiempo y en mayor medida.
• Mayor rendimiento académico: al retener mejor la información, y en mayor cantidad, se consiguen mejores resultados académicos, lo que influye positivamente en la autoestima de los estudiantes.
• Áreas de mejora: al trabajar en grupo, se pueden abordar áreas de mejora individuales, y conseguir mejorarlas gracias al trabajo conjunto. Cada estudiante tiene unos puntos fuertes y unas áreas de mejora, y en el aprendizaje cooperativo se puede sacar ventaja de los puntos fuertes y tomar medidas conjuntas para mejorar los puntos débiles.

3 ideas para aplicar el aprendizaje cooperativo en clase

Ahora que ya lo sabes todo sobre el aprendizaje colaborativo y sus beneficios, te damos algunas ideas originales de cómo aplicarlo en clase de forma exitosa.

1. Juego de mesa personalizado: se trata de un proyecto que puede realizarse en grupos, y que va a desarrollar tanto las habilidades de comunicación de tu alumnado, como su creatividad y su capacidad para “pensar fuera de la caja”. 

Al crear un juego de mesa (que puede ser en formato físico o en formato digital), tu alumnado tendrá que debatir ideas, llegar a acuerdos, tomar decisiones conjuntas… Además, se trata de una actividad adecuada para todo tipo de asignaturas, ya que se pueden hacer preguntas de cualquier tipo: matemáticas, históricas, de lengua… ¡Todo tiene cabida!

Esta actividad hará que tu alumnado profundice en los conocimientos de la asignatura, ya que tendrán que idear preguntas de distinta dificultad, y tendrán que indicar sus respuestas. Se trata de una forma divertida y original de aprender, ¡y de trabajar en equipo! Tendrán que encargarse de diseñar el tablero, de crearlo (en formato digital o físico), de redactar las reglas, de pintarlo…

Este tipo de actividades puedes evaluarlas con Additio App usando la funcionalidad del Magic Box, que te permitirá evaluar un grupo de alumnos.

2. Creación de un podcast: En un mundo dominado cada vez más por los podcasts, ¿por qué no animar a tu alumnado a crear su propio podcast? Se trata de la grabación de contenidos en audio, cuya difusión se hace a través de internet.

Con la creación del guión, la grabación y la edición del podcast, tu alumnado tendrá que trabajar en grupo, lo que desarrollará sus habilidades sociales. Además, al locutar el podcast, mejorará también sus habilidades de comunicación.

En asignaturas como Historia o Ciencias Sociales, la creación de un podcast puede ser muy beneficioso para consolidar conocimientos que de otra forma puede ser difícil de recordar a largo plazo.

Además, recuerda que con Additio App puedes encontrar muchos recursos que te ayudarán a evaluar un podcast, como esta rúbrica para un podcast histórico. Ya sabes, todo lo que hay en Additiopedia es totalmente gratuito, ¡así que aprovéchalo!

3. Proyecto de investigación: otra idea, esta vez más tradicional pero muy efectiva, es juntar a grupos de estudiantes para realizar un proyecto de investigación acerca de la temática que tú les des de tu asignatura.

Los estudiantes tendrán que trabajar conjuntamente en la recopilación de información, discusión de ideas, redacción del proyecto y su posterior presentación al resto de la clase.

Además, si quieres motivar a tu alumnado en la realización de este proyecto, puedes pedirles que hagan un vídeo, que hagan una representación teatral, que creen un mapa mental con las conclusiones clave…

Aprendizaje cooperativo: ¿lo amas o lo odias?

Igual que el resto de metodologías educativas, el aprendizaje cooperativo tiene amantes y detractores. ¿Tú optas por este tipo de aprendizaje en clase? ¿O prefieres aplicar otro tipo de metodologías? Queremos saber qué opinas, así que pásate por nuestras redes sociales y cuéntanos: Facebook, Twitter, Instagram y Youtube.

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¡Nos vemos!